¿Necesitas un poco más de hidratación? Lava y acondiciona el pelo como de costumbre en la ducha y, al salir, pulveriza un poco de este acondicionador concentrado para darle a tu melena un empuje de hidratación. La combinación de leches de almendra, coco y avena (nada de leche animal) aporta suavidad mientras el zumo de limón fresco y el aceite de oliva virgen extra nutre y protege. Este acondicionador sin aclarado también es una forma estupenda de refrescar los rizos el día después de haberte lavado el pelo.